La necrópolis medieval de Barrejo

Descubrimiento:

Este antiguo cementerio se sitúa en la margen derecha del río Cares, en un ligero promontorio sobre el puente medieval del mismo nombre, posiblemente el más antiguo del valle que permanece en pie. Se localizó en 1996 durante los trabajos de construcción de la central hidroeléctrica de Cordiñanes, modificándose su emplazamiento como resultado del hallazgo y permitiendo la documentación y conservación del yacimiento.

Tipología:

Se exhumaron 25 tumbas. Para el enterramiento se procedía a excavar una fosa en el suelo, en la que se ubica la estructura funeraria, que se reconoce con una doble tipología: la mayor parte presentan una caja rectangular formada por lajas de pizarra, teniendo cubierta del mismo material, mientras que las restantes presentan contornada la fosa
con cantos rodados de cuarcita y bloques de caliza, en este caso sin cubrimiento.

La deposición del cadáver se produjo en su interior, probablemente envuelto en un sudario, acostado sobre la espalda y con los brazos junto al cuerpo o sobre la zona ventral, apareciendo todas las inhumaciones sin ajuar. Las tumbas se disponen en la típica orientación cristiana, y los pies al este, empleándose intensamente el espacio funerario.

Caracterización de la población:

Los esqueletos documentados pertenecen a un grupo de edad adulta, diferenciándose dos individuos de este espectro, una niña de unos cinco años y un joven. La aparición de ambos juntos en la esquina suroeste de la excavación pudiera referir, posiblemente, una diferenciación zonal, por edades, dentro del cementerio. El resto de la población muestra una edad relativamente avanzada, como se desprende de su fuerte abrasión dentaria, con ciertos casos de desaparición de piezas y reabsorción de los alveolos, lo que refleja una larga supervivencia tras la pérdida.
También se documentan procesos artríticos y casos de supervivencia a una operación, como es el caso de una trepanación craneal. Estudios forenses recientes han constatado la presencia en algún individuo de muestras de enfermedades con sintomatología similar a la lepra.

Cronología:

El momento de uso de esta necrópolis, en función de los escasos materiales cerámicos localizados y a falta de otros elementos cronológicos más significativos, se podría situar entre mediados del siglo XII y la primera mitad del XIII, por tanto, en la Plena Edad Media.

Fuente: Panel situado en la necrópolis